PALACIO JOSÉ MENENDEZ, TEATRO MUNICIPAL, PALACIO MONTES Y PALACIO DE LAS SONRISAS..
Esta era la casa de José Menéndez, el español que llegó a Punta Arenas muy joven y que fue parte de la historia magallánica en los comienzos.
Esta residencia está en poder del ejército y yo nunca había entrado. Es menos majestuosa que la de Sara Braun, pero no deja de tener un encanto especial. Adentro los militares daban charlas sobre los tiempos del motín de los artilleros, cuando la mujer de José Manéndez, la Sra María Beheti quedó herida de una pierna y así salió escapando y salvando su vida. Lo que no dijeron fue que en esta casa estuvo alojado Fidel Castro, el líder cubano, cuando estuvo en Punta Arenas en el tiempo del presidente Salvador Allende.
Esta pareja de temucanos (Eliset y Luis) andaba recorriendo los museos de Punta Arenas y aprovechando el buen tiempo.
Recorriendo la casa.
Un lavamanos.
Amplios jardines.
Al frente la plaza.
Al lado estaba la casa comercial de Menéndez (Después fue Surco).
No molesten, por favor.
La sociedad Española de Punta Arenas es la dueña del edificio donde estaba el Teatro Cervantes, que conserva la estructura, las pinturas, las lámparas. No están las butacas. Pero es el Cervantes.
Una puerta de escape al lado del escenario.
El escenario.
Las lámparas.
El cielo raso.
Desde el palacio Montes (Municipalidad). Mirando la Plaza.
El Palacio de las Sonrisas donde se realizó una velatón por los magallánicos muertos por la dictadura. En la foto Francisco Betancurt Bahamonde, desaparecido, hasta que alguien se arrepienta y hable.
Sillas, velas y cuadros.
Aquí está el nefasto patrimonio heredado de la dictadura, el Palacio de las Sonrisas hoy convertido en la Casa de los Derechos Humanos.
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